La junta militar de Myanmar informó este sábado que al menos 1.000 personas fallecieron y 2.376 resultaron heridas tras el potente terremoto de magnitud 7.7 que sacudió el país el viernes, con epicentro en la región de Mandalay. Además, hay decenas de desaparecidos, mientras que en la vecina Tailandia se reportan una decena de muertos y un centenar de desaparecidos.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) advirtió que el número de víctimas mortales en Myanmar podría superar las 10.000, y que los daños económicos podrían exceder el Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Aumento drástico en las cifras
El último balance del gobierno militar representa un incremento considerable frente a los 144 fallecidos reportados inicialmente por los medios estatales. Las autoridades confirmaron graves daños en carreteras, puentes y edificios, lo que provocó numerosas víctimas entre la población civil.
El general Min Aung Hlaing, líder de la junta militar, alertó que las cifras podrían seguir aumentando y solicitó ayuda internacional. "Invitamos a todos los países a enviar asistencia y donaciones", declaró.
Respuesta internacional
En respuesta al llamado, un equipo de rescate chino llegó este sábado a Myanmar, mientras que Rusia y Estados Unidos ofrecieron su apoyo. El sismo, que ocurrió al mediodía del viernes, también afectó a Tailandia, donde colapsaron varias construcciones, incluyendo tres edificios en Bangkok.
Tailandia: obreros desaparecidos y rescates en curso
En la capital tailandesa, al menos 10 personas murieron, 16 resultaron heridas y más de 100 siguen desaparecidas, según el vicegobernador Tavida Kamolvej. Entre los afectados hay obreros atrapados en los escombros de una torre en construcción cerca del mercado de Chatuchak, zona turística muy concurrida.
El ministro del Interior, Anutin Charnvirakul, confirmó el hallazgo de ocho cuerpos sin vida en el edificio derrumbado, mientras equipos de rescate lograron sacar con vida a 12 personas. Las labores de búsqueda continúan en medio de fuertes réplicas.
Expertos advierten sobre posibles réplicas
Susan Hough, científica del USGS, explicó a Reuters que es difícil predecir el número final de víctimas, aunque destacó que, al ocurrir de día, muchas personas lograron reaccionar a tiempo. Sin embargo, advirtió que las réplicas podrían agravar la situación en las próximas horas.
Mientras Myanmar y Tailandia enfrentan una de sus peores tragedias en años, la comunidad internacional moviliza ayuda para atender a los damnificados y apoyar las labores de rescate.
Fuentes: Gobierno militar de Myanmar, USGS, Reuters, France 24, medios estatales de Myanmar y Tailandia.
