Durante más de 30 horas continuas, la misión humanitaria liderada por el gobernador de Casanare, César Ortiz Zorro, navegó ríos y atravesó trochas para llevar asistencia a 218 familias damnificadas por la fuerte ola invernal en los corregimientos de Miramar de Guanapalo (San Luis de Palenque), Bocas del Pauto (Trinidad) y La Hermosa (Paz de Ariporo).  

El operativo, desarrollado durante el fin de semana, incluyó la entrega de elementos de primera necesidad para aliviar las difíciles condiciones que enfrentan estas comunidades, ubicadas en las zonas más alejadas del departamento.  

En Bocas del Pauto, la jornada contó con la presencia de la gestora social, Diana Soler; el director de Gestión del Riesgo, Guillermo Velandia, y la alcaldesa Damaris Abril, quienes atendieron a 78 familias de las veredas Araguaney, Arrayanes, Caimán, Alta Gracia y el centro poblado.  

“El esfuerzo y compromiso que hacemos vale la pena cuando se trata de llegar a las familias damnificadas más apartadas de nuestro departamento”, afirmó Velandia.  

De igual forma, se brindó ayuda a 74 familias en Miramar de Guanapalo y Bocas de Urele, y a 66 núcleos familiares en La Hermosa.  

Desde Miramar de Guanapalo, Leonel Acosta, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC), expresó su agradecimiento mientras un fuerte aguacero caía sobre la región: “Ha pegado duro la lluvia, pero hoy sentimos el respaldo de la Gobernación y su equipo humanitario”.  

La misión, que navegó por los ríos Pauto y Meta, enfrentó condiciones climáticas adversas y una extensa jornada de más de 500 kilómetros recorridos, llevando no solo ayuda material, sino también un mensaje de solidaridad.  

"Eso hay que resaltarlo. Por acá casi nadie nos visita. Se nota el compromiso por ayudarnos en estos momentos de dificultad", destacó Emma Villareal, presidenta de la JAC de La Hermosa.